Zacatecas Durante 18 años ha tenido una declaración de emergencia por sequía. En alguna región del estado, el fenómeno climático se ha vuelto recurrente. Como consecuencia, el agua subterránea, sobreexplotada, se bombea cada vez de mayores profundidades.
Entre 2010 y 2011 murió muchísimo ganado por inanición, es decir se murió por hambre. Se les recomendó a los ganaderos vender y no quisieron, porque les daban 2 mil pesos por cada animal.
Informó a este diario Héctor Gutiérrez Bañuelos, doctor en ciencias pecuarias con especialidad en rumiantes por el Collague Station de Texas, quien advirtió que el 80 por ciento del territorio de Zacatecas –unos 7 millones de hectáreas-, está bajo la categoría, según la zona geográfica de que se trate, de árido, semiárido o muy árido.
El problema del cambio climático y las anomalías atmosféricas, han acentuado las sequías, y ha hecho más difícil predecirlas. Eso ocurrió en el año 2021, recordó el investigador con estudios también en la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro, de Saltillo. “Si se desfasan las lluvias, y baja su cosecha, o peor aún a veces no hay cosechas. Lo más grave es cuando se producen dos o tres años consecutivos con sequía. Es muy frustrante para el productor, porque la producción agropecuaria es muy cara, y la rentabilidad de las cosechas es muy baja.
Sobre las técnicas para provocar lluvias, como el bombardeo de nubes con yoduro de plata, el investigador fue claro: “realmente no te ayudan mucho”, explicó, “primero porque hay cosas que no puedes controlar, antes que nada necesitas que haya nubes y en segundo lugar, las nubes no son estáticas, se mueven. Y puede llover donde no necesitabas que hubiera precipitación”.