El jueves fue el turno de 96 organizaciones no gubernamentales cuyo cierre fue aprobado por el voto de 75 diputados sandinistas y sus aliados, mientras 14 legisladores se abstuvieron.
Con esta cancelación suman 179 las organizaciones clausuradas esta semana por el Gobierno de Daniel Ortega y más de 400 desde la revuelta social que puso en jaque a su administración en 2018.
El Presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y su esposa Rosario Murillo, encabezan una manifestación en Managua, Nicaragua. Foto: Alfredo Zúñiga, AP. En un comunicado, el Observatorio para la Protección de los Defensores de Derechos Humanos advirtió que el espacio para la sociedad civil en Nicaragua “sigue reduciéndose” con el cierre arbitrario estas organizaciones.
Tras denunciar el “acoso sistemático , característico de un Estado totalitario”, el Observatorio instó a las autoridades nicaragüenses “a revocar esta decisión y a garantizar, en todas circunstancias, el derecho a la libertad de asociación”.