Los analistas de Moody's advierten de que los próximos meses 'serán críticos', ya que, si la economía global puede resistir durante este período, la senda de crecimiento podría volverse más sostenible.
MADRID -La economía mundial crecerá menos de lo previsto como consecuencia del impacto sobre los problemas de oferta y la inflación de la guerra en Ucrania y de las restricciones impuestas en China para contener la pandemia de covid-19, de acuerdo con la agencia Moody's, que solo anticipa la entrada en recesión de Rusia entre las economías del G20.
En el caso de las economías avanzadas, Moody's prevé que el PIB crezca en 2022 un 2.6%, frente al 3.2% anticipado el pasado marzo, con una expansión estimada del 2.1% para 2023. Para las economías emergentes, por su parte, la agencia rebajó el pronóstico de crecimiento este año al 3.8% desde el 4.2% y anticipa una expansión del 4.2% en 2023.
"A excepción de Rusia, actualmente no esperamos una recesión en ningún país del G-20 en 2022 o 2023", dijo Madhavi Bokil, vicepresidente sénior/RSC de Moody's, para quien, sin embargo, existen múltiples riesgos que podrían socavar aún más las perspectivas económicas, incluida una presión alcista adicional sobre los precios de las materias primas, interrupciones más duraderas en la cadena de suministro o una...
Entre las principales economías del G20, la agencia espera que el crecimiento del PIB de Estados Unidos se modere al 2.8% en 2022 y al 2.3% en 2023, después de la expansión del 5.7% de 2021, con la inflación moderándose gradualmente al 4.9% este año y al 2.1% un año después, mientras que el desempleo se mantendrá en el 3.5% durante el horizonte analizado.